sábado, abril 24

Capitulo 16.- Hermoso nenito

Sabia que no podia pertenecerle a Alex. Seria como si alguien que tiene un accidente de avion se vuelve aeromosa. Ese pensamiento se me provocaba un inmenso dolór. Amaba a dos hombres completamente diferentes y aun asi no podia pertenecerle a ninguno de los dos, claro que no.
Entre a el salón y el maestro aun no habia llegado. Me sente en la ultima mesa y saque el cuaderno repidamente. No levante la cabeza en ningun momento.
La clase paso lentamente. No queria salir del salón para no tener que enfrentarme con el, pero no podia quedarme ahi. Sali agachada del salon con paso rapido, pero senti que alguien me hablaba a mis espaldas cuando casi lleguaba a mi otro salón. Me detube en seco dudando en voltear o no, pero despues senti que alguen me tomaba por el hombro. Voltee la cabeza y vi que era Aura. Suspire de alivio.

- Hola, Aura.
Le dije.

- Estube preocupada por ti todo el fin de semana y te llame como diez veces. ¿Donde estabas? ¿Que te paso? ¿Estas bien?
No respondi. Cada vez que alguen me hacia alguna de esas preguntas me quedaba sin habla, simplemente no podia hablar; y despues venia el llanto. Genial.
Me cubri el rostro con las manos para que no viera mi rostro. Era diferente llorar con ella que con mi hermana; y a la vez diferente que llorar con Alex.
Senti que unas manos me abrazaban.

- Oh, Aura... ¿Que pasa conmigo?
Le pregunte entre sollosos.

- Lo mismo iva a preguntarte.
Me despegue de su abrazo y dude por un momento.

- Te lo dire, pero no aqui. Vamos.
Le dije mientras tomaba su mano y la llevaba al baño.
Cuando llegamos la solte y la mire por un momento. ¿Como se lo diria?

- De acuerdo, ¿Que pasa?
Me dijo dandome animos. Cerre los ojos y respire profundo.

- Estoy... embarazada.
No habri los ojos. Pero aun asi las lagrimas salian a traves de ellos con suma facilidad.
Habri los ojos y ella estaba cubriendo su nariz y boca con ambas manos y tenia las cejas fruncidas.

- ¿Que? ¿Como...? ¿Que...?
Como todos los demas, no pudo terminar ninguna de sus preguntas.
Estiro sus brazos y fui rapido a refugiarme en ellos.
Paso asi un breve momento y me separe de ella limpiandome las lagrimas.

- ¿Tu papá lo sabe?
Me pregunto cautelosa.

- Si.
Habrio los ojos como platos por un momento.

- ¿En serio? ¡Que valiente!
Me dijo mientras me daba otro corto abrazo.

- Gracias.

- Quiero que sepas que yo te voy a apoyar en todo lo que pueda, ¿Ok?

- Ok. Gracias Aura, eres mi mejor amiga.

- Igual.
Salimos del baño y la escuela estaba vacia. La verdad no queria entrar a clases.

- Se ve que no quieres estar aqui.

- No.

- Deberias irte. Yo te llamo en la tarde, ¿ok?

- Gracias, Aura. Pero no puedo dejar sola a mi hermana.

- Yo le aviso.

- ¿Segura?

- ¡Claro! ¿Para que son las amigas?

- Gracias.
Le dije mientras le daba otro abrazo.
Me despedi de ella con la mano y camine hacia la puerta trasera. Por suerte ahi no habia nadie que vigilara, pues esto era irse de pinta.
Llegue a mi casa y me cambie a una ropa mas comoda. Estaba consiente de que la falda apretaba algo mi estomago.
Me sente en mi cama y baje la cabeza hacia mi vientre. Lo estaba frotando con mi mano y senti que tenia un bultito tras mi piel. Una sonrisa se formo lentamente por mi rostro.

- Hola bebé. Yo soy tu mamá.
Le dije tiernamente. Sabia que era muy pronto para que me escuchara, pero no resistia la tentación de hablarle.
Pase un momento asi mientras lágrimas de algo que sabia que no era dolór recorrian mi rostro. Tal ves era la mescla de tantas emociones de la que solo reconocia la felicidad lo que me hacia llorar asi. Eran No era un llanto como el de los ultimos días. Era mas maternal.
Pase aproximadamente una hora asi. Podria estar asi todo el día.
De pronti vibro mi celular. Era un mensaje de Valentina: Hola Val. Ya me informo Aura todo. Nos vemos en la casa.
Suspire. ¿Como se lo habria explicado Aura? Deje el celular a un lado y me di cuenta de que aun seguian ahi las galletas de la mañana. Tome una y comence a comermela lentamente con la mano libre. Decidi meterme a bañar, pues en la mañana no pude.
Me meti a la regadera y puse el agua templada. Me talle el cuerpo con sumo cuidado y despues me lave el cabello frotandome mucho. No estendia la razon por la que me comportaba de este modo. Tal vez era la satisfaccion de saber que la persona más importante en mi vida se iva a quedar conmigo.
Sali de la regadera y me diriji de nuevo a mi cuarto. Me di cuenta de que ya eran las dos. Ya no tardaba en lleguar mi hermana. En ese momento vibro mi celular de nuevo, pero esta ves alguien me llamaba. Lo destape indecisa tratando de desechar el pensamiento de saber quien era.

- ¿Bueno?

- ¿Val? ¡Hola, Val! Soy Monse.

- ¡Oh! Hola monse.
Monse era mi mejor amiga de Querétaro. Y yo la queria mucho, pero se habia enojado conmigo por irme De alla sin darle una explicación.

- ¿Comó estas?
Dude antes de reponderle-

- Bien -Le dije, pero ni yo misma me creia- ¿Que paso? ¿Porque me llamas ahora?

- Bueno, queria pedirte una disculpa por mi comportamiento.

- Oh, claro. Perdonada.
Le dije en tono de broma y ella rio conmigo.

- Bueno, pero aparte te tengo otra noticia.

- ¿Cual?

- ¡José me invito a salir!
José era el chico del que ella siempre habia estado enamorada.
Sabia que la reaccion natural era celebrarlo con ella. Pero por alguna razón me quede en silencio y mis animos bajaron. Talvez se debia a que ella si puede estar con el chico que ama sin ningun miedo a que algo malo le pase. Eran... ¿Celos?

- Oh, que bien.

- Lo dices como si ubiera una noticia más importante.

- Pues...

- ¿Aja?
Dude un momento. Ella y yo no teniamos secretos. Nos contabamos todo. Lo unico que no sabia era la razon del tragico desenlace con Iván.

- Tube sexo.

- ¿Que? ¡Por dios! ¿Encontraste a tu media naranja al fin?

- No... fue aun alla. Con... con Iván.

- Bueno, ¿Y por que me lo dices hasta ahora?
No conteste. No pensaba decir esa palabra de nuevo.
Paso un momento y yo seguia sin decir una palabra.

- Oh, no Val. No me digas que estas...
Ella tampoco dijo la palagra. Un sollozo mio rompio el silencio.

- Por dios Valeria.

- Aja.
Escuche como suspiraba.

- ¿Y estas muy segura?

- Si.

- Dios.
Era la palabra que mas repetia.

- Por eso te fuiste, ¿Cierto?
Dude de nuevo. ¿Se lo contaria?

-Si.
No pude contarle la verdad.

- Oh, me siento como una tonta.

- No te preocupes, no tenias idea. Esta bien.

- No, Valeria. No esta bien. ¿Entiendes la gravedad de la situacion?

- Si. Pero la parte dificil ya paso.

- ¿Tu papá ya sabe?

- Lo sabe todo.

- Dios.
Escuche como la puerta de la casa se habria.

- Escucha, me debo ir. Hablamos luego, ¿Esta bien?

- De acuerdo.
Le colgue el telefono y en el segundo siguiente la puerta de la habitación se habrio.

- Hola, Vale.

- Hola. ¿Con quien hablabas?

- Con una amiga de Querétaro.

- Ah.

- ¿Que te dijo Aura?

- Pues, me dijo que ya lo sabia todo y que vio que no querias entrar a clases asi que te fuiste.

- No lo sabe todo. No le conte como termine asi.

- Ok
En ese momento mi celular volvio a sonar. Era un numero desconocido.

- ¿Bueno?

- ¿Val? Soy Alex.
Genial. Maldije para mis adentros.

- Oh, hola. ¿Que pasa?

- Me preguntaba que te habia pasado. No eh podido saber que te ocurre desde que te lleve a la enfermeria.

- ¿Fuiste tu?

- Claro.

- De acuerdo... ¿Y por que estas tan interesado en saber que me pasa?

- Pues... me preocupas. Eso es todo.
Sentia que mi pecho se iva a empezar a caer en pedasitos. Yo le preocupaba, le interesaba. Se preocupaba pr mi. Una insicnificante estudiante que apenas y habia entrado a la escuela.

- No deberias

- ¿Por que no?

- Soy una chica mala.
Era mala en el sentido de que tomaba las decisiones equivocadas y lastimaba los sentimientos de la gente.

- No lo creo.

- Escucha, debo irme. Adios.
Cerre el celular de golpe. ¿Como podia hacele esto?

- ¿Quien era?

-Alex.
Le respondi agachada.

- Oh.

- ¿Comó vas con las amigas?
Le pregunte cambiando de tema.

- Cero.
Me dijo haciendo los dedos en 0.

- Oh, lo siento.

- Esta bie. Asi estoy a gusto.

- Te prometo que mañana no me escapare para estar todo el día contigo, ¿Esta bien?

- Gracias.
Baje la cabeza y vi mi estomago por un momento.

- ¿Que crees que sea?

- ¿Que?

- El bebé.

- Ah, creo que va ser un precioso nenito.

- Tu crees?

- Si.

- me lo imagino una niña yo.
Dije mientras le sonreia a mi vientre.

- Ya veremos.

- Aja.
Le dije con un suspiro. Me estaba empezando a dar sueño, asi que me recarge en mi cama y cerre poco a poco mis ojos...

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Ola!!!
Este capitulo lo hice en tan solo tres horas.
XD
Espero que les guste
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